viernes, 15 de febrero de 2013

Los resortes de la nostalgia

Es curioso cómo funciona la distancia. No la geográfica, la afectiva. No importa lo bien que estés –lo estoy (mucho)– ni lo ocupado que te encuentres –me encuentro (más)–, la añoranza funciona como un pérfido click que trae de repente a tu memoria, a tu olfato o a tu oido una serie de momentos que desearías recuperar de inmediato.

En mi caso, nada hay asociado sólo a un objeto. Más bien me acuerdo de relaciones por asociación y de un detalle concreto cada vez: A) echo de menos sentarme frente a mi amigo Sergio y su sabiduría enológica y apurar mano a mano una botella de tinto. Y el gesto es la forma que tiene de mover la copa de vino. B) me gustaría tomar un café con Daniel mientras me cuenta el nuevo instrumento que se va a comprar, con esa sonrisa infantil que tiene y que siempre empuja la mía. Y el gesto es cómo apoya el dedo pulgar en la sien mientras está sentado y fuma. C) se extraña el Llamas y sus gintonics, pero rodeados de los amigos y de esas risas que van volviéndose impúdicas a medida que sube el alcohol y baja la vergüenza. D) Y sobre todo se echa de menos a los padres, claro –y perdónenme el alarde sensiblero–, los únicos a los que puede el orgullo parcial y que se equivocan pensando que ellos te echan más de menos que tú a ellos.

Afortunadamente, no me ha llegado un segundo tipo de nostalgia, esa que pesa, que te trepa por la espalda como una araña plomiza... que no venga. Y hablando de venir, creo que hay una tercera clase de la que ya habló García Márquez: la nostalgia por las cosas que sucederán. Si algo siento es que no voy a estar cuando alguien que ahora mide un centímetro y medio nazca, allá por septiembre... Y a sus padres también les echo de menos.

Curiosos los resortes de la nostalgia...

1 comentario:

  1. Grande Morán. Por aquí también se te echa de menos. Las cenas en la cocina metiéndonos un risoto de boletus (o lo que sea, tú sabes) su botella de vino, el postre y los correspondientes gintonics no serán las mismas. Se te quiere bro!

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